Personalmente, estoy más de acuerdo con la
postura y las ideas de Hobbes que con las que expone Rousseau. Creo que el
instinto de supervivencia es lo que mueve a las personas. En la actualidad, por
ejemplo, una persona que no tiene dinero para alimentar a su familia es capaz
de robar para que puedan comer. También, alguien que ha perdido su casa, no se
conforma con dormir en la calle con lo puesto: busca mantas o cartones para
cobijarse del frío, busca cualquier lugar abandonado para estar más protegido,
o bien, si tiene algún familiar cercano, su primer instinto será llamarlo para
no quedarse en la calle.
Sin embargo, esto no quiere decir que esté en
total desacuerdo con lo que nos dice Rousseau. Todo lo contrario, ya que mi
opinión anterior viene condicionada por lo que voy a decir a continuación.
Rousseau expone que las personas son buenas, pero que es la propiedad privada
la que las corrompe, algo con lo que estoy verdaderamente de acuerdo. Pero
claro, me es imposible pensar que en una sociedad como la que tenemos
actualmente, pudiese mantenerse sin la propiedad privada, ya que nos hemos
acostumbrado a que cada persona tenga sus pertenencias sin que ninguna otra
pueda llegar y apropiarse de ellas.
Las soluciones que exponen ambos me parecen
bastante inútiles:
En primer lugar, para Hobbes un monarca absoluto
al que sus iguales le cederían el poder sería la solución a ese estado de
guerra. Sin embargo, para mí personalmente, sería un breve periodo de
tranquilidad, ya que, si el monarca absoluto impone una ley la cual no agrada a
un determinado grupo de personas, la acatarían temporalmente pero al final se
acabarían revelándo contra él, sustituyéndolo por otro, y así sucesivamente.
En segundo lugar, la aparición del Estado sería
un mal menor para evitar ese estado de guerra, según Rousseau. Creo que esta
sensación de desacuerdo la comparten conmigo muchas personas actualmente, ya
que no hay más que verlo. La aparición de un estado supone que ese estado
represente al pueblo, no que lo sustituya como ha ocurrido siempre y como sigue
ocurriendo. El fallo de Rousseau fue pensar que el estado representaría al
pueblo en vez de decidir por él, y si las personas conocen el comentido del gobierno
y conocen también que no lo está cumpliendo, volvería de nuevo ese estado de
guerra. Es por eso por lo que esta medida me parece también de poca utilidad.
En conclusión, pienso que ambos tienen razón en
algunas de las ideas que expusieron, pero lamentablemente, ninguna de las
soluciones que aportaron para remediar ese estado de guerra me ha parecido la
más adecuada.